Investigaciones internacionales muestran que 8 de cada 10 negocios nuevos fracasan antes de cumplir tres años, una estadística preocupante tanto para emprendedores experimentados como para novatos. Esta realidad, cargada de incertidumbre, subraya la importancia de elegir cuidadosamente el camino a seguir antes de invertir tiempo y dinero en un nuevo proyecto.
En este contexto, las franquicias emergen como una opción atractiva para emprendedores. Este modelo de negocio, que ha ganado popularidad en los últimos años, ofrece la ventaja de asociarse con una marca ya establecida y de éxito comprobado.
Optar por una franquicia puede ser una vía más segura y efectiva de emprender, brindando apoyo y una estructura probada para el éxito empresarial.
Entremos en materia.
¿Qué es una franquicia?
Una franquicia es un acuerdo donde una parte, el franquiciador, permite a otra, el franquiciado, utilizar su marca y modelo de negocio por un período y a cambio de una inversión inicial. Este sistema beneficia a ambos: el franquiciador expande su marca con el apoyo del emprendedor, quien recibe formación, asesoramiento, y el respaldo operativo y de mercado de la marca. Para quienes desean emprender sin experiencia previa, invertir en una franquicia ofrece una vía menos riesgosa gracias al soporte continuo y el know-how proporcionado por el franquiciador.
Este modelo se destaca por su seguridad como inversión, ya que alinea al franquiciado con una marca establecida y reconocida, incrementando las posibilidades de éxito en comparación con iniciar un negocio desde cero.
- Recorte de gastos en materia de marketing y comunicaciones, ya que el emprendedor aplicará las herramientas con las que lo dota la marca.
- El emprendedor, antes de comenzar a operar en el mercado, recibe capacitación y asesoría en todo lo que necesita para que ese negocio sea productivo y exitoso, desde la búsqueda del local, si se requiere, hasta la contratación de personal.
- La empresa franquiciante, brindará acompañamiento y apoyo permanente al franquiciado.
¿Qué papel juega el soporte proporcionado por el franquiciador en el crecimiento y éxito continuo de las franquicias?
El apoyo del franquiciador es crucial para el éxito y crecimiento sostenido de una franquicia. Proporciona a los emprendedores herramientas y recursos esenciales para iniciar y gestionar su negocio eficazmente. Esto abarca formación inicial en el modelo de negocio, transferencia de conocimientos y prácticas destacadas, junto con materiales y manuales de soporte.
La asistencia del franquiciador continúa en áreas clave como marketing, gestión de inventario, desarrollo de productos o servicios y soporte técnico, permitiendo a los franquiciados sortear errores comunes y aprovechar al máximo las oportunidades de éxito. La relación cercana y el asesoramiento constante del franquiciador aseguran altos estándares de calidad y coherencia en la red de franquicias, mejorando la imagen de la marca y fortaleciendo el vínculo con los clientes.
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